El dolor “bueno” del ejercicio

 El dolor “bueno” del ejercicio


¿Alguna vez has hecho algún deporte o actividad física que requiera de mucho esfuerzo? Entonces conoces ese familiar dolor que comienza a sentirse algunas horas después. Los deportistas y fanáticos del ejercicio lo conocen como el dolor “bueno”. Dependiendo de tu cuerpo y tus hábitos deportivos, su intensidad puede variar. A veces puedes sentir una leve molestia en los músculos y otras veces puedes sentir que te acaba de atropellar un camión. Sea cual sea la magnitud del dolor, siempre termina desapareciendo al cabo de unos días. Pero, ¿sabes a qué se debe este sufrimiento?




El dolor muscular de inicio tardío o DOMS es la rigidez que adquieren tus músculos cuando realizas alguna actividad o esfuerzo físico al que no estás acostumbrado. Suele ocurrirle a las personas que comienzan una nueva rutina o ejercicio y se presenta entre 12 y 24 horas después de terminar tu entrenamiento. Este fenómeno es causado por los diminutos desgarres que sufre el músculo al encontrarse bajo intenso trabajo físico. Cuando estos desgarres sanan, el músculo crece.




A pesar de que es normal sentir un poco de dolor muscular después de haber hecho alguna actividad física demandante, es importante que sepas diferenciarlo del dolor por alguna lesión. El dolor por el trabajo de los músculos aparece hasta algunas horas después de finalizar tu rutina, nunca durante, y debes sentirlo en el grupo muscular que hayas ejercitado. El dolor por lesión es el que se presenta mientras continúas haciendo tu rutina. Su intensidad puede variar, a veces puedes terminar tu entrenamiento, pero permanece como una molestia aguda; mientras que otras veces puede resultarte tan insoportable que te obliga a detenerte antes de concluir tus repeticiones. Si notas esto, debes detenerte de inmediato y acudir a revisión con un fisioterapeuta.


Ahora que ya sabes a qué se debe esta sensación, te hablaremos de algunas cosas que puedes hacer para disminuirla. Puedes probar aplicando frío para desinflamar o aplicando calor para aumentar el flujo sanguíneo. También puedes probar usando un rodillo de espuma durante 20 minutos para masajear tus músculos inmediatamente después de terminar tu ejercicio y en los días posteriores. Los estiramientos son una de las maneras más efectivas para reducir tus molestias, pues así tus músculos se relajarán antes y después del trabajo, así no permanecerán rígidos. En FWF podemos ayudarte a realizar los estiramientos correctos para completar tus entrenamientos y mejorar tu flexibilidad con nuestra clase de stretching.


¡Encuéntranos en nuestras redes!




Entradas populares de este blog

El origen de la danza aérea

EL ENTRENAMIENTO FUNCIONAL NO ES LO QUE PIENSAS

La calistenia es una de las disciplinas que ofrecemos en FWF pero, ¿Sabes lo que es?